
De origen humilde, autodidacta, carpintero ebanista, y comunista desde muy joven, Severo Aguirre del Cristo llegó a ser Doctor Honoris Causa, miembro del Comité Central del Partido Comunista desde su fundación, presidente del Parlamento Cubano y embajador de nuestro país en la extinta Unión Soviética.
Nació el 1 de mayo de 1912 en La Habana, en una familia de obreros, y murió el 13 de enero de 1992, a sus 79 años, tras dedicar toda su vida a la causa revolucionaria. Sus primeras actividades políticas datan de 1930, fecha en que ingresó en la Liga Juvenil Comunista de Cuba (LJCC), organización juvenil del Partido Comunista, y de la cual fue su Secretario General desde 1932 hasta su disolución en 1943.
Simultáneamente, ingresó en el Sindicato de Cooperativas y laboró en la Dirección de Defensa Obrera Internacional, sección cubana del Socorro Rojo Internacional. Sufrió persecuciones y cárceles durante la tiranía de Gerardo Machado, y en 1934, al año siguiente del derrocamiento de la dictadura machadista, participó en condiciones clandestinas en el II Congreso del Primer Partido marxista leninista en calidad de delegado fraternal de la Liga Juvenil Comunista de Cuba (LJCC). En este mismo Congreso se le dio ingreso formal al partido y lo eligen miembro del Comité Central.
Presidió la delegación del Comité Central de la LJCC al VI Congreso Internacional Juvenil Comunista celebrado en Moscú el propio 1934, donde fue elegido miembro del Comité Ejecutivo de esta organización, cargo que desempeñó hasta la disolución de ésta en 1944.
Severo participó activamente en la lucha contra el nazi-fascismo en los años de la Segunda Guerra Mundial. A partir de 1950 pasó a laborar en el aparato clandestino del partido. En 1951 colaboró en los trabajos de organización y desarrollo del Partido Comunista de Guatemala y de su central obrera. Al ser derrocado el gobierno de Jacobo Arbens en 1954, por instrucciones del partido se trasladó a la Unión Soviética y después a México. Regresó a Cuba en 1955 y se le incorporó al Buró Ejecutivo del Partido Socialista Popular para dirigir la Comisión Agraria.
En 1958 viajó a Venezuela, Brasil y Uruguay para informar a los partidos comunistas de esos países el objetivo de la guerra revolucionaria del pueblo cubano contra la sangrienta dictadura de Fulgencio Batista, y de regreso cumplió misiones de información y coordinación en la zona guerrillera del Comandante Ernesto Guevara en el Escambray.
Posteriormente, se incorpora junto Carlos Rafael Rodríguez, delegado permanente del Partido Socialista Popular en la Columna 1 comandada por Fidel Castro en la Sierra Maestra, hasta la victoria de enero de 1959 y acompaña la columna rebelde en su entrada triunfante en Santiago de Cuba.
Continuaría después del triunfo su labor junto a la Revolución cumpliendo las tareas asignadas, como viceministro primero del Instituto Nacional de Reforma Agraria y luego Decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad de La Habana. Fue miembro de la Dirección Nacional de las Organizaciones Revolucionarias Integradas (ORI) desde su constitución el 8 de marzo de 1962 y luego fundador del nuevo Partido Comunista de Cuba y miembro de su Comité Central desde 1962.
En el plano internacional presidió la delegación cubana que asistió al XXI congreso del Partido Comunista en Moscú, celebrado en enero de 1959. Fue embajador de Cuba en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en 1973 y miembro del Consejo Técnico Asesor del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Por sus méritos y prestigio el pueblo lo eligió diputado al parlamento cubano, llegando a ser presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular en la Tercera Legislatura. al asumir el cargo por la muerte de Flavio Bravo Pardo en su condición de vicepresidente.
Sin poseer antes una preparación académica, tuvo la visión de la importancia del desarrollo científico de los recursos humanos, al iniciar en la dirección de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de La Habana la formación de los primeros graduados que obtenían Grados Científicos, siendo ya Severo en aquel entonces Candidato a Doctor en Ciencias. Como Decano de la Facultad visitaba las clases teóricas y prácticas para comprobar cómo se desarrollaban, y fue también promotor de los estudios posgraduados, las investigaciones en las universidades y la vinculación de estudiantes y profesores con las unidades de producción como parte de su formación integral.
Fue investido como Doctor Honoris Causa de la Escuela Superior de Veterinaria de Kosice, Checoslovaquia. Recibió numerosas condecoraciones nacionales, fue Profesor de Mérito de la Universidad de La Habana y fundador del Centro de Investigación para el Mejoramiento Animal. Inició los cursos de Marxismo-Leninismo para los docentes e insistió en que los profesores prepararan libros a partir de los conocimientos y experiencias acumuladas a través de las investigaciones.
Su legado como revolucionario y comunista es recordado por el pueblo en todas las importantes tareas revolucionarias a las que dedicó su vida.