
Cada 13 de junio el pueblo cubano recuerda en su cumpleaños a Armando Hart Dávalos, destacado revolucionario, martiano, político e intelectual de fidelidad absoluta con el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, y cuyo accionar estará siempre vinculado a la Campaña de Alfabetización y al desarrollo cultural de Cuba.
De temperamento inquieto, hiperquinético, creativo, siempre generando ideas cuando, con gesto característico, daba vueltas a un lápiz con su mano derecha. El carisma, modestia, ética y sensibilidad de Hart lo convertían en líder de cualquier auditorio, fueran obreros, campesinos, estudiantes o intelectuales.
Al decir de Miguel Barnet fue “el gladiador de mil batallas, el incansable que convierte lo cotidiano en extraordinario (…) Con las balas en la cartuchera y el gatillo listo en el disparador de ideas, de proyectos y acciones que encontraran ecos en los amigos agradecidos para quienes él, impoluto con su cubanísima guayabera blanca, será siempre el Ministro que inauguró la categoría de ministros de lujo”.
Nació un 13 de junio de 1930 y falleció en La Habana el 26 de noviembre de 2017, tras trabajar toda su vida sin límite de horas los siete días de la semana, y haber sido un activo dirigente de la lucha clandestina contra la tiranía batistiana, cumplir prisión, y ocupar importantes responsabilidades después del triunfo revolucionario del 1 de enero de 1959.
Desde muy joven Hart se incorporó a la Juventud Ortodoxa y fue un destacado dirigente estudiantil en la Universidad de La Habana. Cuando ocurrió el golpe de Estado el 10 de marzo de 1952 suscribió, como dirigente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), una denuncia pública y participó activamente en las protestas estudiantiles en favor de los principios democráticos. En ese mismo año se graduó de abogado.
Integró el Movimiento Nacional Revolucionario de proyecciones democráticas, patrióticas y antiimperialistas. Estableció relaciones con jóvenes opositores en diversas provincias y desarrolló fuertes vínculos con Frank País y con Fidel. “Con certeza puedo afirmar que mi vida está dividida en dos etapas fundamentales: antes y después de conocer a Fidel Castro”, confesó Hart quien combatió a los partidos de oposición burguesa y estuvo entre los fundadores del Movimiento 26 de Julio (M-26-7) como miembro de su Dirección Nacional. “
Participó activamente en el alzamiento del 30 de noviembre de 1956 en Santiago de Cuba en apoyo al desembarco del yate Granma. En los momentos más difíciles de la guerrilla dirigida por Fidel Castro, en febrero de 1957, marchó al encuentro de esta en la Sierra Maestra en compañía de Frank País, Faustino Pérez y otros miembros de la Dirección Nacional del Movimiento 26 de Julio, para coordinar el apoyo desde el llano y guiar al periodista del New York Times, Herbert Matthews, a la presencia de Fidel. La publicación de la entrevista del periodista al líder de la guerrilla echaría por tierra la propagada batistiana basada en la supuesta muerte de Fidel.
Ese mismo año fue detenido y condenado a varios años de prisión. Cuando era conducido a los tribunales realizó una espectacular fuga reincorporándose a la lucha clandestina. Entonces fue nombrado Coordinador Nacional del Movimiento 26 de julio. En enero de 1958 fue arrestado nuevamente cuando bajaba de la Sierra para cumplir una misión de Fidel, encarcelado en Oriente y luego llevado al presidio de Isla de Pinos, donde permaneció hasta el triunfo.
Tras asumir el poder el gobierno revolucionario fue designado como primer ministro de Educación del Gobierno Revolucionario cubano, cargo que ocupó seis años, desde 1959 hasta 1965. Dirigió la Campaña de Alfabetización, reconocida como la más amplia y eficaz llevada a cabo en América Latina.
Formó parte desde su creación de la dirección nacional de las Organizaciones Revolucionarias Integradas (ORI) y del Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba (PURSC). Al surgir en 1965 en Partido Comunista de Cuba (PCC) fue elegido miembro del Comité Central y de su Buró Político, y ratificado así en todos los congresos posteriores.
Desde fines de 1970 hasta finales de 1975 fue Primer Secretario del PCC en la antigua provincia de Oriente, realizando una intensa labor política bajo la dirección del comandante Juan Almeida Bosque, quien fue nombrado delegado del Buró Político del PCC en esa extensa región que hoy conforman cinco provincias. Hart jugó un importante papel en el estudio previo y creación de condiciones para la aplicación de la nueva División Política Administrativa.
Al decidir el gobierno la creación del Ministerio de Cultura, a finales de 1975 fue designado ministro de esa nueva cartera, cargo que desempeñó desde inicios de 1976 hasta 1997. En ese período sentó las bases de todo el actual sistema de Festivales y Concursos en las diferentes ramas del arte y la literatura, definió la función de las distintas instituciones del sector, creó el sistema de Casas de Cultura y los módulos de instituciones culturales que debía tener cada municipio del país, impulsó la difusión cultural en todas las ramas, estableció bases firmes de la enseñanza artística hasta el nivel superior, fortaleció la UNEAC cimentando las relaciones con intelectuales y artistas, y potenció la proyección internacional del nuevo ministerio.
Tras 21 años como Ministro de Cultura pasó a dirigir la Oficina del Programa Martiano, adscripta al Consejo de Estado, y como intelectual aportó una amplia obra dedicada al estudio de la figura histórica y el pensamiento de José Martí. Creó y presidió la Sociedad Cultural José Martí y fue distinguido como Doctor Honoris Causa por prestigiosas universidades cubanas y extranjeras.
Desarrolló una notable labor ensayística y en el campo del periodismo. Fue un firme defensor del uso de la crítica constructiva y el apoyo a la labor de los órganos de prensa, lo cual fue reconocido en varios congresos de los periodistas cubanos. Algunos de sus libros fueron en su momento aportes muy novedosos en materia de política cultural y la gestión de una nueva conciencia sobre el socialismo. Hoy siguen siendo una referencia obligada.
En su vida recibió numerosas distinciones nacionales y extranjeras. El General de Ejército, Raúl Castro, le impuso el 13 de junio de 2010 la Orden José Martí en sus 80 años. Falleció producto de una insuficiencia respiratoria a los 87 años de edad, el 26 de noviembre de 2017, un día después del primer aniversario de la partida física de su eterno jefe y amigo Fidel Castro.